Crecí a la sombra de la Madonnina de Milán, donde nací en 1985. En 2012 entré en la Orden Dominicana y en 2016 hice mi profesión solemne.

Después de los tres años de filosofía y los tres años de teología, fui ordenado sacerdote en 2019. Durante estos años he realizado algunas actividades pastorales como el acompañamiento vocacional, los grupos juveniles, la predicación y la confesión.

Ahora estoy siguiendo mis estudios de teología espiritual dado mi interés en la enseñanza de los santos (especialmente los Padres de la Iglesia, Santo Tomás de Aquino), la ascética y la mística, y todo lo que ayude a profundizar en el conocimiento del misterio de Dios.

Pasando de lo sagrado a lo profano, siempre he sido un incorregible y apasionado fanático del Inter de Milán y amante de los deportes en general. Siempre he admirado a Bud Spencer y Terence Hill, quienes, entre un plato de frijoles y una saludable pelea, siempre me han dado horas de tranquilidad.

Idiomas hablados: italiano, español e inglés